Para ser hombres libres, debemos comenzar por pensar en libertad.

Para ser hombres libres es preciso que mente y cuerpo estén en íntima comunión con aquello que pretendemos hacer, vivir o callar.
Es muy común escuchar a ciertos grupos y otros tantos personajes a los que se les ha ocurrido apropiarse del nombre de libertad. En el fondo lo que podemos ver detrás de las bambalinas de estas posiciones,  no son otra cosa que directrices aprendidas, impuestas y en ocasiones manipuladas por quienes saben utilizar muy bien  la pedagogía de aplicar lo que más conviene a la conveniencia personal.
Por eso  he querido llamar este artículo "para ser hombres libres, debemos comenzar por pensar en libertad".  Para llegar a este título me he inspirado en la vida y obra de quien nos enseño  hasta pagar con su misma vida el  verdadero ideal de libertad.  JESÚS.

Qué tan libres somos para elegir lo que le estamos ofreciendo  a esta  única vida que nos ha correspondido vivir?.  Hasta dónde  estamos dispuestos a  llegar,  para alcanzar los genuinos anhelos que todos tenemos de libertad?

Si tienes la oportunidad de leer este mensaje te pido tan sólo un momento para que purificando tu alma y tu mente,  te des cuenta si,  "en espíritu y en verdad",  has elegido el camino que has querido vivir o si por el contrario estas viviendo lo que te ha tocado vivir.

Se puede ser libre en una cárcel luchando por libertad  y se puede ser tan esclavo en las selvas y ciudades cuando somos oprimidos por ideales en los que  aparece como mecanismo quitar la libertad de otros. Quien es libre ofrece  libertad, partamos de esta premisa " nadie pude ofrecer lo que no tiene" y esta otra: " de la abundancia del corazón habla la boca".

En este jueves Santo todos deberíamos sentarnos en la mesa con Jesús, de El si que aprenderíamos el ideal de libertad, pero cuidado, debes elegir el personaje que quieres ser, pues en la misma mesa que se sentó la verdad y el amor supremo, también se sentó quien por ignorancia o manipulación, representó el prototipo de traición y esclavitud. Espero que al levantarte de la mesa te quedes impregnado de los ojos y el corazón de quien te dio la libertad, cuidado con perder este precioso tiempo para planear la forma de entregarle.

Cuando aprendemos la Historia de los pueblos, nos damos cuenta que todos ellos han estado movidos por el ideal de libertad; algunos la han conseguido a precio de la sangre de muchos héroes que han preferido morir,  antes entregar su libertad y la de sus hermanos.  En Colombia llevamos no menos tiempo suplicando, que cese  la horrible noche, muchos ya han entregado su vida, por este anhelo de libertad, pero debemos reconocer que aún hoy hay muchos rincones de Colombia hay hombres mujeres y niños que entre "cadenas gimen" esperando con la fe de los pobres que "el bien germine ya".

Estamos presenciando uno de los momentos más importantes para el presente y futuro de nuestra nación; el gobierno y el grupo terrorista de las FARC, sentados en la mesa de diálogos desde Cuba, ( cuna de la opresión y maestra de la mas refinada dictadura),  deciden lo que según ellos, mejor le conviene a más de 50 millones de colombianos. Ojalá y le rogamos a Dios, que no sean sus egos recalcitrantes y venenosos los que se estén imponiendo para esclavizar aún más a un pueblo que ya ha pagado con caros intereses la libertad que nunca ha prestado, vendido o empeñado.

Debo decirles con mucha libertad, que ni unos ni otros tienen la moral, la verdad y la libertad para decidir lo que en realidad le conviene al pueblo colombiano, más,  cuando lo hacen en el más absoluto anonimato. He preguntado y por supuesto no he obtenido respuesta,  si lo que allí están  decidiendo, estos  maestros de la esclavitud y la corrupción,  es la libertad o la esclavitud, la vida o la muerte, la verdad o la mentira.   por favor, que alguien en un ataque de libertad  y vergüenza, le diga al pueblo hacia donde vamos y de qué manera  se esta favoreciendo la libertad y el bienestar de una nación tan grande y tan noble como la nuestra.

Le pedimos a Dios y rogamos para que nuestro pueblo de una vez y por larga vida,  pueda tener la paz y la libertad que en realidad nos merecemos y por las que El mismo Jesús hace más de 1980 años murió .

Lucha por ser libré, que le podamos contar a nuestros hijos y nietos que un día deje de formar parte del pueblo espectador y me decidí por ser protagonista  y  " testigo de la verdad hasta el martirio...cuando  se hizo necesario"

"El amor a la libertad hace al ser humano indomable y a las naciones invencibles."


Omar Antonio Bedoya G.
Twitter @omantoni1


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Carta abierta al Presidente de la República Iván Duque

NO FUE TAN FÁCIL AMARTE, PERO ES TAN FÁCIL QUERERTE